domingo, 23 de febrero de 2014

VOLUNTAD Y SONRISA

Propicios días,

¿Sabéis aquello de que cuando las cosas van mal, muy mal... todavía pueden ir peor? ¿Que cuando piensas "cupo cubierto", todavía hay sitio para más? ¿Habéis tenido alguna vez la sensación de que el abismo era lo más parecido a vuestra seguridad? Es en esos momentos en los que mi amigo Eddy hace su entrada con bombo y platillo... "aquí estoy"... "si algo puede salir mal, sale mal! porque de eso me encargo yo". 

¿Que hacer en esas etapas tan duras?

 Me rodeo de mis mejores amigas; esos seres maravillosos que, con el paso del tiempo, se hacen cada vez más importantes. 

Con mis años a cuestas, lo que he aprendido es:
El tiempo pasa.
La vida pasa.
Las distancias separan.
Los hijos crecen.
Los trabajos van y vienen.
La pasión disminuye.
Los hombres no siempre hacen lo que se supone deberían hacer.
El corazón se rompe.
Los padres se mueren.
Los colegas olvidan los favores recibidos.
Las carreras profesionales llegan a su fin.

PERO...

Tus amigas siempre están, independientemente del tiempo y de todos los kilómetros que haya de por medio. Una amiga nunca está demasiado lejos para llegar cuando la necesitas: Cuando tengas que caminar por un valle solitario y tengas que hacerlo por ti misma, las mujeres de tu vida estarán dándote ánimos, empujándote, interviniendo por ti y esperándote con los brazos abiertos al final del camino. Algunas veces, incluso, romperán las reglas y caminarán a tu lado... O vendrán y te llevarán en sus hombros. Amigas, hijas, abuelas, hermanas, suegras, nueras, cuñadas, nietas, tías, primas, sobrinas: son una bendición en la vida! Cada día que pasa, nos seguimos necesitando.

Hace unos días, me encontré con una de esas amigas. Preparé un té, unos cupcakes y me dejé mimar, querer y aconsejar. 



Lo siento pero para cuando tuve el móvil preparado para la foto, ya le había pegado un par de mordiscos.... 

¿Por qué todo parece tan fácil y claro después de una conversación con una de ellas? Todo cambia... error: ¡tú cambias! aunque todo siga igual. 

¿Sabéis que me aconsejó? Me gustaría compartirlo por si puede ayudar a alguien: VOLUNTAD y SONRISA. Voluntad para seguir tirando adelante y Sonrisa para engañar al cerebro y que se piense que todo va bien. ¡Como somos!


Por favor, ¡tened la voluntad para ser felices y la sonrisa para demostrároslo!

Como siempre, gracias por estar aquí.

Chorros de besos

No hay comentarios: