domingo, 17 de noviembre de 2013

HELLO KITTY

Propicios días,

Me encargaron hace unos días una tarta de cumpleaños  para una pequeña princesita. 

- "Es demasiado pequeña para las princesas... "

- "Heidi le asusta por los colores tan fuertes que viste..."

-" ¿Que te parece Hello Kitty?"

En ese momento tenía una vaga noción de lo que estaba proponiendo pero como me gusta informarme y curiosear sobre lo que voy a diseñar, automáticamente me puse a navegar por el ciberespacio buscando a Helow Kitty. Y... madre mía, ...había tantas variantes con la misma cara que empecé a soñar y a ver Hellow Kitty allí donde iba. Empezó a ser cómo una pesadilla. Lo genial es que a pesar de todo siguió pasándome desapercibido un detalle. Tenía claro que esa gatita blanca con forma antropomórfica tenía que convertirse en mi próxima creatividad pero había "algo" que me inquietaba. 

¿Cuántas veces habéis visto la figura de Hello Kitty? ¿Cuántas tiendas dedicadas a esta gatita existen y por cuántas de ellas hemos pasado y/o entrado? Pues bien... por muchas veces que la hayamos visto, comprado, regalado y dibujado... ¿cuántas de estas veces nos hemos dado cuenta que no tiene boca?  Sólo conozco a una persona que lo sabía: la novia de mi hijo mayor. 



Vamos  por la vida demasiado deprisa y no nos paramos a disfrutar de las pequeñas cosas que nos rodean. Sabemos que Kitty es la delicia de muchas niñas, que duermen con ella, se visten con y como ella, sueñan con ella, se sienten protegidas por ella ... pero ¿no nos extraña que alguien tan querido por esas pequeñas personitas  no tenga boca? No. No nos extraña porque no nos hemos parado a mirarla con sufieciente atención. 


Bine. Pues es cierto. No tiene boca! Me aluciné a mi misa. No me lo creía. Busqué, rebusqué, miré,... definitivamente no era mi vista la que me hacía una mala pasada. Era la realidad. 


Y ¿por qué? Encontré multitud de leyendas urbanas pero con un denominador común: su creadora , Yuko Shimizu, tenía una hija que no podía hablar. 


Hello Kitty tiene ya treinta años. Y ahora, después de todos estos años y gracias a un encargo, me he dado cuenta de ese pequeño/gran detalle. 

Por cierto, la tarta era de chocolate rellena de crema suiza de mantequilla de naranjas. ¡Una delicia para los paladares adultos y dulce y esponjosa para los niños!

Id despacio! Disfrutad!

Como siempre... gracias por estar aquí!

Chorros de besos

No hay comentarios: